Rusia lanzó un ataque este jueves en la ciudad ucraniana de Járkov (noreste), matando al menos a dos personas y dejando una veintena de heridos, y su gigante Gazprom reanudó el suministro de gas a Europa a través de Nord Stream, aunque persisten los temores de una crisis energética.
Dos personas murieron y 19 resultaron heridas este jueves en un bombardeo ruso en Járkov, segunda ciudad de Ucrania ubicada en el noreste, afirmó el gobernador regional, Oleg Synegubov. La víspera murieron tres en otro bombardeo, incluyendo un adolescente cerca de una parada de autobús.
Rusia acusó el jueves a Ucrania de haber llevado a cabo esta semana ataques con drones en el emplazamiento de la central nuclear de Zaporiyia, en el sur de Ucrania, que está bajo control ruso desde marzo.
Human Rights Watch (HRW) acusó el jueves a las tropas rusas y ucranianas de poner en peligro «innecesariamente» a los civiles al estacionar tropas en los centros de zonas pobladas.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, dijo el miércoles que los objetivos militares de Rusia en Ucrania ya no se limitaban «únicamente» al este del país.
Rusia ha registrado en las últimas semanas conquistas territoriales en el este de Ucrania, tomando Severodonetsk y Lyssytchansk, lo que le abrió el camino para intentar avanzar hacia las ciudades de Kramatorsk y Sloviansk, más al oeste.
– Europa vuelve a recibir gas ruso –
Ucrania, por su parte, sigue reclamando más armas y sanciones contra Moscú.
«Los rusos quieren sangre, no negociaciones. Pido a todos los socios que refuercen las sanciones contra Rusia y aceleren el suministro de armas a Ucrania», urgió el ministro ucraniano de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba.
De visita en Estados Unidos, la primera dama de Ucrania, Olena Zelenska, pronunció un discurso ante el Congreso y pidió más armas para afrontar la guerra contra Rusia.
En el frente energético, Europa respiró de alivio este jueves después de que Rusia volviera a abrir su flujo de gas a Europa, a través de Nord Stream, tras una suspensión de operaciones por mantenimiento.
Este gasoducto está en el corazón del enfrentamiento geopolítico entre Europa y Rusia.
«Está funcionando», declaró a AFP un portavoz de la sociedad Nord Stream el jueves por la mañana.
Según los primeros datos publicados por el operador alemán de esta red, Gascade, el flujo equivale al que este gasoducto registró antes de la suspensión de operaciones por mantenimiento, que corresponde a un 40% de su capacidad.
Rusia responsabilizó a los occidentales por los problemas técnicos en el suministro de gas a Europa.
«Son las restricciones las que impiden reparar los equipos, especialmente de las turbinas en las estaciones de compresión», afirmó el jueves el portavoz de la presidencia, Dmitri Peskov.
También calificó de «completamente falsas» las acusaciones contra Moscú de «chantaje» con el gas.
La Comisión Europea está preparando el terreno para enfrentar una eventual escasez de gas durante el invierno. (AFP).