Otros nombres:
– En México: sábila, aloe, toba xa, toba xha, zotollin.
– En Bolivia: aloe, agave, sabila, sawila, lank’u, lap’i, jaya jaya.
– En Guatemala: sabila, aloe vera.
– En inglés: aloe vera, Barbados aloe, bitter aloe, burn plant, coastal aloe, common aloe.
En medicina natural
En medicina natural, el aloe vera es una de las plantas más usadas, difundidas y registra miles de años de uso. Muchas de las propiedades médicas que se le adjudican han sido probadas científicamente mientras otras tantas quedan en el ámbito de la sugestión.
En atención primaria de la salud se la ha indicado como antihemorroidal, antiasmático, expectorante, antiácido, antiulceroso, hepatoprotector, laxante, antinflamatorio, antiseborreico, cicatrizante, tónico capilar, e inmunomodulador.
Para qué se usa
Tradicionalmente, y según señala Natural Standard, se la ha usado para tratar afecciones tales como: enfermedad de Alzheimer, artritis (osteoartritis, artritis reumatoide), asma, infecciones bacterianas dérmicas, trastornos en los vasos sanguíneos, trastornos intestinales, síndrome de fatiga crónica, insuficiencia cardíaca congestiva, quemadura por frío, gingivitis, pérdida del cabello, prevención de cardiopatías, hepatitis, colesterol elevado virus del papiloma humano (VPH), picazón (en la piel), cálculos renales o en la vejiga, leucemia, liquen plano (una afección de la piel), infecciones por parásitos, enfermedad de Parkinson, rasguños o heridas superficiales en el ojo, quemaduras de sol, lupus eritematoso sistémico, contracciones nerviosas dolorosas (neuralgia trigémina, dolor facial severo), tumores incurables, contracepción vaginal e infecciones de levadura en la piel.
También se aprovechó como antifúngico, antioxidante, antimicrobiano, antitumoral, antiviral, anticonceptivo, enjuague quirúrgico periodontal y reductor del ácido estomacal.
Existe alguna evidencia científica favorable del uso de aloe vera para el estreñimiento, usándola como laxante, el herpes genital, la psoriasis vulgaris, y dermatitis seborreica (seborrea, caspa).
Con insuficiente evidencia o evidencia científica poco clara agrupamos las siguientes afecciones para las que el aloe vera podría servir: prevención del cáncer, úlceras bucales (estomatitis aftosa), diabetes (tipo 2), resequedad de la piel, infección del VIH, liquen plano, quemaduras o úlceras en la piel, colitis ulcerosa (incluye la enfermedad del intestino inflamado), y cicatrización de heridas.
Además, existe evidencia científica desfavorable sobre su uso en casos de: mucositis, úlceras por presión, y dermatitis por radiación.
Cómo se usa
El aloe vera se procesa industrialmente partiendo de dos grandes derivados, el jugo, y el látex. El jugo (líquido o polvo) es el que se comercializa en la mayoría de los suplementos. El látex, que proviene de la sabia amarillenta, se vende como «látex de aloe» y contiene glucósidos de antraquinona que tienen propiedades laxantes.
Para usar la planta naturalmente, se aconseja pelar la hoja para obtener el gel semitransparente, en forma de filete. De esa manera se puede refrigerar y guardar un par de días, tapado para evitar la contaminación.
Para la mayoría de las afecciones se consume cortado en pequeñas porciones en forma de cubos para ser ingeridos, o en forma de óvulos para tratamientos vaginales, supositorios o hemorroides.
Al extraer la piel verde, se puede recolectar y guardar la sabia que es ese látex amarillento, amargo, que como mencionamos, se suele utilizar como laxante.
Tanto el látex como el gel de la hoja deberán guardarse refrigerados y tapados. En cada nuevo corte del gel guardado, enjugar con agua limpia.
Nunca hervir ni sobrecalentar la hoja de aloe vera ni su gel para que no modifique sus propiedades. En cualquier caso, un profesional de la salud deberá supervisar el uso de esta planta como medicamento natural teniendo en cuenta que, para la mayoría de los usos, existe poca evidencia y podrían darse efectos adversos.
Vía oral
– Confeccionar pequeñas porciones en forma de cubos y conservar en frío. Ingerir una o dos porciones, 2 o 3 veces al día.
– Añadir varias porciones a un litro de agua hervida. Tomar medio vaso, 2 o 3 veces al día.
– Para usar el látex como laxante, la dosis que a menudo se recomienda es la cantidad mínima para mantener las heces disolutas, típicamente entre 0.04 y 0.17 gramos de jugo seco. Si se trata de la sabia se suele usar una cucharadita pequeña al día.
Rectal o vaginal
Preparar pequeñas porciones en forma de óvulos o supositorios, colocar una porción, 2 o 3 veces al día.
Uso tópico
– Colocar el cristal en forma natural sobre la zona afectada, dejar unos minutos y retirar.
– Añadir varias porciones del cristal a un litro de agua hervida y emplear en fomentos o compresas. El gel puro de aloe vera se usa a menudo sin restricciones en la piel entre 3 y 4 veces al día para el tratamiento de quemaduras de sol y otras quemaduras menores.
– Para el tratamiento del herpes genital, aplicar una crema en las lesiones durante 5 días consecutivos a la semana hasta por 2 semanas.
– Para la psoriasis aplicar crema de aloe vera en la piel 3 veces al día, 5 días a la semana, durante un mes.
Preocupación sobre su uso
No es aconsejable su empleo de manera oral en niños menores de 10 años, mujeres embarazadas o que estén amamantando. No existe suficiente evidencia para el uso tópico en menores, pero se debe consultar previamente a un dermatólogo.
Alergias
Las personas con conocidas alergias al ajo, cebollas, tulipanes u otras plantas de la familia de las liliáceas pueden presentar reacciones alérgicas a la sábila. Las personas que usan gel de sábila por períodos prolongados han desarrollado reacciones alérgicas, incluidas las urticarias y brotes en forma de eczemas. Las inyecciones de sábila han producido reacciones severas y deben evitarse.
Uso contraindicado
El uso como laxante, como sucede con otros laxantes, no se recomienda en pacientes con enfermedad de Crohn, colitis ulcerativas, o síndrome de colon irritable, entre otras. Tampoco debe ser consumido con otras hierbas, drogas o medicamentos que actúen como laxantes.
Se han asociado casos de muerte con inyecciones de aloe vera bajo circunstancias extrañas. No se recomienda el uso por inyección debido a la ausencia de datos sobre su seguridad. (HolaDoctor.com).