En Colombia, la lluvia es una de las condiciones climáticas más comunes en ciudades y en carreteras nacionales por la variedad de pisos térmicos, pero también por los pronósticos y alertas que son emitidas periódicamente por los expertos. Para este año, según información de Ideam, se espera, por tercer año consecutivo, que la temporada de lluvias esté influenciada por el fenómeno de La Niña y se esperan aumentos de lluvias en un 30 % con respecto a años anteriores.
En consecuencia, la Agencia Nacional de Seguridad Vial resalta que en condiciones de lluvias cambia el margen de visibilidad y se afecta la adherencia de las llantas con el suelo. La conducción en superficies con agua, polvo y en ocasiones grasa puede ocasionar que el conductor pierda el control del vehículo al realizar aceleraciones y frenadas intempestivas, así como giros bruscos.
Según el Observatorio de Seguridad Vial de la ANSV, en el primer semestre de 2022 se presentaron 63.836 siniestros viales, de los cuales 4.032 fueron causados por las intensas lluvias. Durante este periodo lluvioso, en 74 de estos siniestros se registraron víctimas fatales.
El director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Luis Lota: “Es muy importante que al conducir se cuente con buena visibilidad para ver el camino, pero también a otros usuarios viales, especialmente los más vulnerables: peatones, ciclistas y motociclistas, y tener en cuenta que la lluvia también puede afectar otras condiciones como el frenado y el control del vehículo”.
Finalmente, la ANSV le recuerda a los peatones, ciclistas y motociclistas que utilicen elementos reflectivos, transiten con precaución sobre las líneas, diagramas y elementos de demarcación horizontal que se encuentren sobre la vía.