El Instituto Colombiano Agropecuario (ICA), Agro-Bio y Acosemillas hacen un llamado a los productores agrícolas colombianos que se dedican a la siembra de cultivos de maíz y algodón Genéticamente Modificados (GM) con resistencia a algunos insectos plaga (Cultivos Bt), a que establezcan el refugio, con el fin de mantener la población de insectos susceptibles en campo.
En Colombia, los cultivos Bt aprobados con esta tecnología controlan en gran medida algunas de las plagas principales que son responsables de atacar los cultivos y generar grandes pérdidas para el productor, como son el gusano cogollero (Spodoptera frugiperda) en el maíz y el gusano rosado (Pectinophora gossypiella), en el algodón.
El llamado que hacen las entidades es al cumplimiento de la Resolución ICA No. 072221 de 2020, que ordena implementar el cultivo refugio como medida para retrasar la generación de resistencia de las plagas objetivo de la tecnología en los cultivos GM que tienen característica de resistencia al ataque de ciertas plagas.
“Queremos promover la implementación de las mejores prácticas cuando se haga uso de semillas genéticamente modificadas de maíz y algodón y que los agricultores que las siembran puedan con ellas tener control sobre ciertas plagas. Así, se fortalecerá la producción de alimentos y productos procesados en el país”, asegura Alberto Rosero, Director Técnico de Semillas del ICA.
El refugio es una porción en el mismo terreno donde se cultivan los cultivos genéticamente modificados con tecnología Bt, que se siembra con semillas que no tiene la característica de resistencia a insectos; esta área servirá para mantener la población de insectos susceptibles, disminuyendo así la probabilidad de desarrollo de poblaciones resistentes a la proteína de los cultivos Bt.
Esas áreas de refugio deben ser sembradas al lado o a una distancia no mayor a 500 metros del cultivo Bt, en la misma fecha y con las mismas prácticas de manejo, a excepción de la aplicación de insecticidas que se regulan de acuerdo a la especie vegetal y su esquema de refugio.
La norma emitida por el ICA contempla un conjunto de actividades y medidas basadas en estudios de investigación en bioseguridad, prácticas culturales y recomendaciones propias para el manejo integrado del cultivo. Para el caso de los cultivos GM, estas buscan también asegurar un uso adecuado y sostenible de las tecnologías que se siembran en el país.
El ICA, Agro-Bio y Acosemillas realizan campañas periódicas que buscan sensibilizar a los agricultores, distribuidores, asistentes técnicos y otros actores sobre las prácticas agrícolas para los cultivos GM como: preparación de terreno, uso de las semillas autorizadas, el monitoreo y control permanente, la rotación de cultivos y la siembra del refugio.
Asimismo, productores que han experimentado las ventajas del uso de los cultivos Bt quieren promover entre sus colegas la siembra del refugio y así proteger la durabilidad de la tecnología.