En su primera visita a la central Hidroituango, el contralor General de la República, Carlos Hernán Rodríguez Becerra, llamó la atención sobre la prudencia y el rigor técnico con el que deben asumirse los análisis de las medidas que se tomen sobre el sector minero energético y, adicionalmente, recomendó que la intervención a las Comisiones de Regulación de Servicios Públicos se realice de manera técnica, mirando las necesidades reales de los usuarios y respetando las leyes de libre mercado.
Rodríguez Becerra reconoció que Hidroituango es un activo estratégico para garantizar la oferta energética presente y futura del país y por esta razón se hace indispensable mantener el especial seguimiento y los acompañamientos que la CGR ha venido realizado desde marzo de 2022, para velar por la adecuada inversión de los recursos recuperados con el fallo de responsabilidad fiscal por $ 4,33 billones y para contribuir a minimizar riesgos (ambientales, sociales, sectoriales, técnicos y financieros), asociados a este proyecto.
“Hoy en este gran proyecto, vital para el presente y futuro energético, aprovecho para advertir que Colombia debe asegurar unas reservas probadas de petróleo suficientes para emprender una transición energética segura.
Asimismo, estimó urgente que se tenga en cuenta la previsión por parte de las instituciones de facilitar la entrada de nueva oferta de energía tanto de generación, como de activos de transmisión de energía, frente a un fenómeno del niño prolongado previsto para el cuarto trimestre de 2023.
“Hoy hay una imperiosa necesidad de agilizar la construcción de las líneas Colectora-Cuestecitas y Copey-Cuestecitas, en La Guajira y El Cesar; activos que permitirían la entrada de 9 proyectos eólicos y solares, que aportan 1.577 mega vatios (MW) de oferta de electricidad y con ello mejorarían la seguridad energética”, resaltó. En este sentido, hizo un llamado para que se agilicen estos proyectos, a fin de no colocar en riesgo la seguridad energética del país.