El inicio de obra de un nuevo Sena en Cesar es una realidad, gracias a los esfuerzos técnicos, administrativos y financieros entre el Sena, el Ministerio del Interior y la Alcaldía de Valledupar, como parte de los compromisos y acciones del Gobierno Nacional que permiten impulsar los procesos de formación con enfoque diferencial.
La inversión de esta importante obra tiene un valor superior a los $4.500 millones y cuenta con un área de cerca de 1.000 m2, donde resultarán beneficiados alrededor de 64.400 integrantes de las comunidades indígenas pertenecientes a los pueblos: Arhuaco, Kogui, Wiwa, Kankuamo, Yukpa, Chimila y Wayúu, con presencia en el Departamento.
«Con este gran proyecto buscamos, desde el inicio, promover y proteger las culturas indígenas, pero además potenciarlas dándoles las herramientas para ampliar su conocimiento y posibilidades. Estamos convencidos de que esta puesta en marcha de la construcción, se verá reflejada en unos años y generará comunidades indígenas más preparadas, con mayor desarrollo en sus resguardos y territorios ancestrales», dijo Daniel Palacios, ministro del Interior que, además, aseguró que este es un reconocimiento a las comunidades, pero también a Valledupar.
Por su parte, Wilson Rojas, director administrativo y financiero del SENA explicó que la idea de trabajar en las sedes Sena étnicas nació en un consejo de ministros: «Propusimos construir cinco centros más con este enfoque; este el primero, para ello está contemplado implementar ambientes de formación especializados en agricultura, cacao, café, temas transversales de las TIC, siempre en busca de fortalecer y potencializar sus habilidades».
La puesta en marcha de la construcción de esta sede contó con la presencia de líderes, representantes y autoridades de las distintas comunidades indígenas, medios de comunicación y aprendices Sena de la comunidad Kamkuama, entre otros.