La Procuradora General de la Nación, Margarita Cabello Blanco, aseguró que a pesar de las reiteradas alertas y recomendaciones hechas por el Ministerio Público al Gobierno Nacional para atender de manera adecuada el alto flujo de migrantes irregulares con destino a Estados Unidos, los riesgos para esta población persisten y los niños son los más afectados.
Durante su intervención en un foro sobre Derechos Humanos en la universidad Sergio Arboleda, la Procuradora aseguró que, solo en los tres primeros meses de este año transitaron por el Urabá 110.000 personas, lo que representa un aumento del 26 % en comparación con el mismo periodo del año anterior, esto a pesar de que se han endurecido las regulaciones migratorias en Panamá y Estados Unidos.
“Decisiones como la adoptada por el gobierno de Panamá, al cerrar al menos tres pasos fronterizos, no deben distraernos de la realidad: los flujos migratorios por la zona del Darién no se detendrán. Los grupos armados ilegales son los más interesados en que el tránsito continúe”, apuntó al jefe del Ministerio Público.
También se refirió al fortalecimiento de las rentas ilícitas percibidas por esos grupos en la región del Urabá, que se estimaron superiores a 140 millones de dólares en 2023 por cuenta de mal llamado “impuesto” exigido por el Clan del Golfo, que oscila entre 200 y 700 dólares por persona.