135 familias, alrededor de 688 personas, pertenecientes al Pueblo Wiwa, empezaron su retorno hacia sus territorios ancestrales en El Limón, Carrizal y Contadero y Conchamaque, zona rural de Riohacha, en el departamento de La Guajira, tras seis meses de desplazamiento que los llevó a radicarse en dos albergues en la capital guajira.
La Unidad para las Víctimas, desde el 25 de febrero de 2024, ha brindado asistencia y ayuda humanitaria a la población Wiwa de estas comunidades.
Este retorno se concretó tras la decisión conjunta de las familias y el apoyo de las entidades que conforman el Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a Víctimas, como la Gobernación de La Guajira, Alcaldía de Riohacha, Policía Nacional, el Ejército, la Personería Distrital, el Icbef, la Defensoría del Pueblo, la Procuraduría y autoridades de la comunidad indígena Wiwa, quienes, a través de los Comités de Justicia Transicional, recibieron el compromiso de la institucionalidad de cumplir el objetivo primordial de garantizar las condiciones de seguridad necesarias para el retorno de estas comunidades a sus lugares de origen.
“Seguiremos haciendo seguimientos a través de mesas de trabajo. El retorno de estas comunidades no significa que dejaremos de acompañarlas; tenemos muchos desafíos y debemos avanzar en la mayor presencia del Estado para estas comunidades y recuperar sus proyectos de vida”, explicó Mario Ríos Oñate, director de la territorial Cesar-La Guajira de la Unidad para las Víctimas.