Basada en un análisis hecho sobre la materialización de desastres naturales ocasionados por los efectos del fenómeno La Niña en Colombia, la Defensoría del Pueblo lanza una alerta por la amenaza a la que estarían expuestas las comunidades, como también por las posibles consecuencias que se podrían derivar de un evento climático similar.
“No hemos superado los impactos de El Niño y ahora debemos prepararnos para una temporada de intensas lluvias, que podría ser potencializada por La Niña entre junio y septiembre próximos, así como alistarnos para el inicio de ciclones tropicales en el Atlántico, que tendrían lugar en cuestión de semanas. La situación conllevaría inundaciones, crecientes súbitas, avenidas torrenciales y deslizamientos”, alerta el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
Se prevé que para la temporada de ciclones tropicales se consoliden 23 tormentas tropicales, 11 huracanes y cinco huracanes mayores. Por esa razón, hace un llamado acuciante a todos los organismos de carácter nacional, regional y local con responsabilidades en la gestión del riesgo de desastres: “Implementen medidas de reducción del riesgo y atención de emergencias y actualicen los planes de gestión y estrategias, ante los posibles impactos y vulneraciones de los derechos de las comunidades en el territorio nacional”.