El papa Francisco reiteró la postura de la Iglesia sobre el matrimonio y dijo que es una unión exclusiva entre hombre y mujer. Dos días antes de un gran sínodo en el Vaticano, donde se discutirán cuestiones sobre parejas homosexuales y la ordenación sacerdotal de las mujeres, Francisco contestó a un grupo de cinco cardenales conservadores, uno de ellos mexicano, que le pidieron públicamente reafirmar la doctrina católica sobre estos temas.
Los cardenales Brandmüller, Burke, Sandoval Íñiguez, Sarah y Zen Ze-kiun presentaron cinco preguntas al papa solicitando aclaraciones sobre una serie de cuestiones relativas a la interpretación de la “Revelación Divina”, la bendición de las uniones entre personas del mismo sexo, la sinodalidad como dimensión constitutiva de la Iglesia, la ordenación sacerdotal de las mujeres y el arrepentimiento como condición necesaria para la absolución sacramental, indica un comunicado con la respuesta del papa.
Sobre el tema del matrimonio homosexual, Francisco aseguró que “el matrimonio es una unión exclusiva, estable e indisoluble entre un varón y una mujer. Solo a esa unión llama ‘matrimonio’.
Otras formas de unión solo lo realizan de modo parcial y análogo, por lo cual no pueden llamarse estrictamente ‘matrimonio’. Por esta razón la Iglesia evita todo tipo de rito o de sacramental que pueda contradecir esta convicción y dar a entender que se reconoce como matrimonio algo que no lo es”.
Sobre la ordenación sacerdotal de mujeres, dijo “para ser rigurosos, reconozcamos que aún no se ha desarrollado exhaustivamente una doctrina clara y autoritativa acerca de la naturaleza exacta” del tema. Por ahora sigue manteniendo la idea que el sacerdocio es exclusivo de los hombres.
Sobre el perdón como derechos humanos, dijo: “Hay muchas maneras de expresar el arrepentimiento. Frecuentemente, en las personas que tienen una autoestima muy herida, declararse culpables es una tortura cruel, pero el solo hecho de acercarse a la confesión es una expresión simbólica de arrepentimiento y de búsqueda de la ayuda divina”.
1,300 millones de católicos opinaron sobre la iglesia
Por último, “debe quedar claro que todas las condiciones que habitualmente se ponen en la confesión, generalmente no son aplicables cuando la persona se encuentra en una situación de agonía, o con sus capacidades mentales y psíquicas muy limitadas”, dijo.
El papa Francisco abrirá este miércoles 4 de octubre en el Vaticano la 16ª Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, punto culminante de una extensa consulta mundial sobre el futuro de la Iglesia católica que terminará el 29 de octubre.
Durante dos años, los casi 1,300 millones de católicos de todo el mundo fueron invitados a expresar su visión de la Iglesia y los temas de actualidad. El proceso fue lanzado por el papa Francisco, que desea instaurar un funcionamiento menos piramidal en la Iglesia católica.
“Es un gran espacio de reflexión de la Iglesia, sobre su manera de ser y de proceder”, resumió a la AFP el sacerdote italiano Giacomo Costa, secretario especial de esta asamblea. (Newskeek).