Hace 14 años se estipuló a través de la ley 1355 de 2009, la celebración de la semana de los hábitos de vida saludables que constituyen una manera de prevenir múltiples enfermedades y gozar de una buena calidad de vida. Igualmente, el 24 de septiembre se conmemora en Colombia el Día de la Lucha contra la Obesidad y el Sobrepeso, condiciones que si se tienen desde la infancia reducen la expectativa de vida entre 5 y 10 años.
La obesidad es una de las problemáticas que más afecta a la salud de las personas y genera un fuerte impacto económico a los sistemas sanitarios. El recién publicado Atlas mundial de obesidad 2023 predice que más de 4.000 millones de personas en el mundo, equivalente al 51 % de la población global, sufrirán de sobrepeso y obesidad en 2035, frente a los 2.600 millones de 2020.
De acuerdo con la Organización Panamericana de la Salud, la obesidad es uno de los principales factores de riesgo para numerosas enfermedades crónicas, entre las que se incluyen la diabetes, las enfermedades cardiovasculares, la hipertensión y los accidentes cerebrovasculares, así como varios tipos de cáncer. Además, los niños con sobrepeso tienen un mayor riesgo de mantener esta condición o desarrollar obesidad en la edad adulta.
De acuerdo con el médico internista y endocrinólogo, Iván Darío Escobar, coordinador de la Red Colombiana de Actividad Física, REDCOLAF, la lucha contra la obesidad requiere principalmente de un compromiso personal en la implementación de hábitos de vida saludables. “Algo que caracteriza a los humanos es que por lo general somos muy rutinarios y tenemos unos hábitos de vida fuertemente arraigados; sin embargo, en la mayoría de los casos dichos hábitos de vida son perjudiciales para la salud. Ejemplo de ellos, son la inactividad física, el sedentarismo; el tabaquismo; la ingesta de productos ultra procesados y el consumo excesivo de bebidas azucaradas, entre otros”.
En este sentido, el doctor Escobar complementó: “Un propósito o plan de vida del ser humano es vivir el mayor tiempo posible, con calidad, y con el mayor nivel de funcionalidad, es decir sin mayor deterioro del estado físico y mental. Esto se puede lograr, ¡pero no es gratis! Tenemos que cuidar nuestro cuerpo y nuestra mente desde que nacemos, incluso desde que estamos in-útero, para lograr más y mejores años de vida. Por lo anterior, es que los hábitos y estilos de vida saludable toman la mayor relevancia”.
Aunque son muchos, desde REDCOLAF, el doctor Iván Darío Escobar, resalta los siguientes hábitos de vida saludable:
1. Ser activo físicamente. Las personas que son físicamente activas tienen un menor riesgo de morir por cualquier enfermedad, un 33% menor que aquellos que no son físicamente activos y, además de vivir más años y mejor. Por esto estamos invitando a hacer del movimiento un hábito; así, cualquier actividad física contribuye en la mejora de la salud, como puede ser caminar, conducir bicicleta, o bailar, entre otras; lo importante es movernos: Recuerde que todo paso cuenta.
2. Tener una alimentación CESA (completa, equilibrada, suficiente y adecuada). Se recomienda evitar bebidas azucaradas y productos ultra procesados y preferir alimentos naturales y beber agua e incrementar el consumo de frutas y vegetales.
3. Dormir lo necesario. Cada persona requiere de ciertas horas mínimas para dormir; en los adultos serían entre 7 y 9 horas. Si, por ejemplo, alguien requiere como mínimo 7 horas cada noche para dormir, el tratar de dormir menos, lo puede enfermar, aumentando el riesgo de diabetes, hipertensión, enfermedad coronaria, obesidad, entre otras. El cerebro y el resto del cuerpo deben descansar para repararse y desechar los subproductos tóxicos del metabolismo.
4. No fumar. El fumar reduce el potencial de vida entre 10 y 15 años. El problema, además de reducir la expectativa de vida en años, es que el desenlace es una afectación en la calidad vida por el enfisema pulmonar, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, y el estar dependiendo de oxígeno suplementario sin poder casi deambular.
5. Recibir sol. Exponerse al sol al menos unos 20 minutos al día brinda la cantidad suficiente de vitamina D requerida. Esta es primordial para una mejor salud general, en especial para los músculos y los huesos. Es más recomendable el sol a primeras horas de la mañana. Sin embargo, se recomienda usar bloqueador solar después de 20 minutos de exposición.
6. Estar en contacto con la naturaleza. En palabras de Juan Carlos Santacruz, director de la Fundación Colombiana de Corazón, al estar en contacto con la naturaleza se recibe “vitamina N”. Disfrutar del campo o del bosque, o el simple hecho de caminar en un parque con árboles, nos dispensa una paz interior y miles de beneficios para la salud mental y física. Además, nos hacemos uno con el planeta.
7. Mantener emociones positivas y excelentes relaciones con los demás. La mente y el cuerpo siguen los mandatos de los pensamientos. Clave cuidar la autoestima y pensar en positivo. Mantener relaciones adecuadas con la pareja, hijos, amigos y vecinos impacta el bienestar. Buscar la paz mental trae buenos resultados para la salud en general.
Para finalizar, la nutricionista-dietista Rocío Gámez, una de las fundadoras de REDCOLAF, y miembro del equipo de trabajo de la red, recomienda dos aspectos claves para cambiar y adoptar hábitos de vida saludable: “Lo primero, es que debemos revisar lo que nos frena para asumirlos; y lo segundo, es considerar qué nos motivaría a realizar estos cambios de hábitos para lograr un mayor bienestar y calidad de vida”, expresó. Para luchar contra la obesidad y los tiempos sedentarios y para vivir más y mejor la recomendación es hacer del movimiento un comportamiento diario e incorporar otros hábitos de vida saludable, sueño de calidad, disminución del estrés y una alimentación consciente.