La directora territorial de la URT en el Cesar y La Guajira, Astrid Navarro, acompañada de los funcionarios de la dirección de Asuntos Étnicos, sostuvo un encuentro con autoridades de las comunidades Kwanimun, Karwa, Seykurin y Jimain del pueblo Arhuaco, con quienes acordó retomar las mesas técnicas de la gestión de restitución que, por causa de la pandemia y otras circunstancias, fueron suspendidas en 2019.
El encuentro fue realizado en el territorio ancestral de esta comunidad indígena dada la importancia que la entidad asigna a la atención de la ruta colectiva,“Honrando el compromiso de nuestro presidente y del “Gobierno del Cambio”, retomamos el diálogo y el encuentro con las autoridades de estas comunidades indígenas arhuacas, con quienes acordamos la ruta más expedita para establecer mecanismos efectivos de atención en sus procesos. Estamos convencidos del histórico rol que nos corresponde en la gestión para restituir derechos territoriales de uno de los cuatro pueblos de la Sierra Nevada de Santa Marta, quienes en esencia representan nuestras raíces como nación multiétnica y pluricultural”, indicó Navarro Rodríguez.
En 2015, comunidades indígenas del pueblo arhuaco acudieron a la Unidad de Restitución de Tierras de la territorial Cesar, La Guajira, en busca de atención como reclamantes en el marco de la ruta colectiva establecida a partir del Decreto Ley de Víctimas 4633 de 2011.
Por cuatro años, hasta 2019, esta comunidad étnica, víctima del conflicto armado colombiano, se articuló en diálogo con la territorial de la URT Cesar-La Guajira, proceso del que se derivaron varios acuerdos que sentaron las bases para el abordaje del proceso de gestión por parte de la entidad.
Los acuerdos y acciones logradas en territorio ancestral arhuaco en 2019, permitieron desarrollar mesas técnicas para definir la metodología y la posterior caracterización de las afectaciones padecidas en las diferentes comunidades que, por causa de la violencia, fueron despojadas u obligadas a abandonar de manera forzada el que siempre ha sido su territorio.
Como herederos de la Madre Tierra y en el marco del respeto a su autonomía, cosmovisión y cosmogonía, los arhuacos participaron activamente en el proceso de caracterización de las afectaciones sufridas en el territorio y al territorio, esto último, considerando el daño ambiental producido, desde el momento que fueron obligados a emigrar masivamente hacia otros lugares.
Precisamente son estas acciones, las que se propone reimpulsar la dirección territorial de la Unidad de Restitución de Tierras, territorial Cesar, La Guajira, con las que se busca cumplir el plan operativo de atención a las comunidades étnicas, a través del cual se prioriza la articulación y el trabajo conjunto con las autoridades indígenas y sus resguardos.