Las autoridades jordanas han anunciado que la situación está “bajo control” en el puerto de Aqaba, en el sur del país, donde este lunes se ha producido una fuga de gas de “un material tóxico” que ha provocado la muerte de al menos 11 personas y heridas a más de 250.
“La fuga está muy lejos de las áreas residenciales y la situación está bajo control”, ha asegurado el gobernador de la provincia de Aqaba, Mohamed al Rafaia, en declaraciones a la televisión estatal Mamlaka TV.
Según la cadena, hasta el momento se han contabilizado al menos 11 muertos, mientras que 251 personas han sufrido asfixia y están siendo tratadas en hospitales de la zona y en otros centros habilitados por las autoridades para atender a los afectados.
Imágenes de las cámaras de seguridad del puerto difundidas por la televisión estatal jordana Jordan TV muestran el momento en el que se produce una especie de explosión al desprenderse un contenedor que estaba siendo cargado en un buque y que impactó en la cubierta.
Tras el impacto, una enorme nube de un intenso color amarillo se propagó por toda la zona, mientras que el personal portuario salió corriendo del lugar antes de ser engullidos por el gas.
Las autoridades jordanas aseguraron que se trató de un “accidente”, que se produjo por un problema con el cableado de la grúa que sujetaba el contenedor de gas.
Según la agencia de noticias estatal jordana Petra, el depósito que impactó contra el buque contenía “gas de cloro”, altamente tóxico. Agregó que las unidades de la Defensa Civil inspeccionaron la zona y empezaron a lavar todos los materiales que resultaron contaminados por el gas.
Por su parte, el portavoz del Ejecutivo, Faisal al Shabul, instó a los residentes de Aqaba a que no se acerquen al lugar de la fuga. (El HuffPost / EFE).