“Este proceso de restitución de tierras constituye un caso de despojo emblemático y desde la URT acompañamos e impulsamos cada una de sus etapas, especialmente considerando los hechos victimizantes que dieron origen a este delito que ha sido reconocido y tiene trascendencia regional y nacional por su magnitud”, aseguró el director territorial Magdalena Medio, Rafael Figueroa Rincón.
Cabe señalar que, en varias oportunidades, habían sido aplazadas y reprogramadas las inspecciones judiciales a cargo de la URT en el sur del Cesar, porque no se presentaban las condiciones de seguridad necesarias para adelantar el proceso de restitución.
“En esta ocasión, se contó con el apoyo de la Policía Nacional que suministró los helicópteros y solo de esta forma, se logró realizar la inspección judicial al predio. La hacienda Bellacruz está siendo objeto de restitución y debía visitarse hace varios meses por orden judicial. Es uno de los casos más importantes de despojo que se adelantan por el impacto que tuvo para esta región los hechos de violencia que generaron el desplazamiento en el sur del Cesar”, afirmó el director territorial.
Es así como el equipo social y catastral de la Unidad de Restitución de Tierras, acompañado de miembros de la Fuerza Pública, ingresó a la zona en dos aeronaves de reconocimiento para la determinación de usos del predio, detección de terceros, invasiones o construcciones en los 161 predios que han sido solicitados en restitución de tierras y que hacen parte de lo que se conoce como hacienda Bellacruz, Lote 1, Lote 2 y Lote 3, así como los baldíos: Caño Grande, Potosí, Los Bajos, San Miguel, San Simón y Venecia.
Es de resaltar, que los hechos violentos que se vivieron en Bellacruz y que generaron el desplazamiento forzado, durante dos décadas, de las 160 familias que habitaban y cultivaban estas tierras productivas, ocurrieron el 14 de febrero de 1996 y fueron catalogados como un crimen de lesa humanidad.
“La URT trabaja para lograr la reparación integral y el enfoque transformador de las personas que fueron despojadas de sus predios por grupos paramilitares. De igual manera, la Unidad reconoce que la situación que se vivió en Bellacruz fue difícil para los campesinos, principalmente, por el tema agrario. Es por eso, que buscamos la reivindicación, la reparación de las víctimas y cumplir con nuestras metas de ampliar la restitución de tierras en todo el Sur del Cesar”, concluyó Figueroa Rincón.